Homilía día Natividad de la Virgen María

 8 de septiembre de 2025

Fiesta de la Natividad de la Santísima Virgen María

Caserío de El Socorro. 

Güímar-Tenerife

Homilía

Nuestra Señor de El Socorro se nos presenta como un remedio actual y activo. No es sólo un recuerdo del pasado. No es que practiquemos la memoria y como otros lo han hecho también nosotros venimos aquí cada 7 y 8 de septiembre a vivir de recuerdo o del sentimiento.

María para tí y para mí es un bien actual y activo en este momento de nuestra vida.  Ella despierta fascinación y conmueve lo profundo de nuestro corazón y lo hace con la capacidad que ella tiene para transfigurar cada instante de su vida. No hay un solo momento de su vida que no nos refiera a la grandeza de Dios.

San Gregorio Nacianceno dijo: "Si no fuera tuyo Cristo mío me sentiría criatura finita". 

¡Qué hermosa esta afirmación que se hace de nuestra Madre la Virgen María!. Si no fuera de Cristo, sería una mujer más. Pasaría con algo de renombre en la historia pero no con la grandeza conque hoy se presenta y gana nuestro corazón y nos rendimos a sus pies. 

Si no fuera tuyo Cristo mío me sentiría una criatura finita. Sería un navegante perdido. Un remero sin rumbo. Un alma muerta. 

María despierta en cada uno la necesidad de pertenecer a Cristo. De ser de Cristo para que nuestra vida no sea un vagar sumando días. Lo verdaderamente actual valiente y transformador en nuestra vida es tener hoy la libertad de reconocer que pertenezco a Cristo. Nuestro mundo nos vende como modas y soluciones de nuestra existencia muchas cosas pasajeras, superfluas que no tienen consistencia, y que dentro de unos meses nos propondrá una alternativa igual de frágil, pequeña limitada y caduca.

Todos lo sabemos y hemos tenido la experiencia que cada vez que por circunstancias de la vida hemos vuelto a la grandeza de Cristo nuestro corazón se engrandece. Nuestra vida se significa. Él por su parte nos lo ofrece todo. 

Cristo está presente en todo lo que me sucede y que pueda transmitir a Cristo en todo lo que hago , en todo lo que digo y en todo lo que toco. 

Eso es adelantar la gloria del cielo aquí en la tierra. 

¿Cómo? 

Hay cuatro itinerarios: 

1º. Escuchar el Corazón. Escuchar lo que mi corazón le complace y le llena de sentido. Cuando escuchamos la moda no necesariamente coincide con el corazón porque me han prometido algo que me da grandeza y sin embargo mi corazón me atestigua que estoy matándolo. 

2º. Atender la realidad. En esa realidad ser capaz de descubrir como Cristo me cuida, me da la fuerza necesaria y veo como Cristo prende la luz de la grandeza de la fe en mi corazón y eso me basta. 

Camino con los problemas. Él va conmigo. El éxito en la vida no es la ausencia de problemas. Ser fieles a la realidad. Vivir en medio de las dificultades y problemas cabiendo que ahí Cristo me acompaña me da la luz y la fortaleza para caminar y transformar este mundo. 

3º. Permanecer unido a Cristo. Fieles a la Eucaristía en esta mesa espléndida mientras vamos al cielo. 

¡Qué pena nos perdamos esta experiencia con tanta facilidad!.

Eucaristía y confesión. Vivir en la gracia y en la armonía con Dios. 

4º. Asumir la intencionalidad de Jesús en todo. El reto que Ntra. Sra. de El Socorro pone en nuestras vidas y corazón es engendrar a Cristo como ella lo hizo. Generar su nacimiento en todos los que nos rodean.  

D. Víctor Manuel Oliva García. 

Párroco de San Lázaro, San Benito Abad, Ntra. Sra. del Carmen y Ntra. Sra. del Coromoto en La Laguna. 

Ecónomo de la Diócesis de San Cristóbal de La Laguna.