Este fin de semana 29 y 30 de diciembre, la Iglesia Católica estrena un nuevo Año litúrgico con la llegada del Aviento preparando nuestro corazón para acoger al EMMANUEL, DIOS CON NOSOTROS.
Se anima a grandes y pequeños a decorar en casa una corona del Adviento. Poner un plato, unas ramas verdes haciendo un círculo pinchadas en una esponja para hacer ramos, y sí no se tiene un corcho, o en otro objeto que le de volumen. Fijar las cuatro velas. A ser posible, tres color morado y una rosa.
Y si no, las que estén en casa o se puedan comprar.
Oraciones para cada una de las semanas
Primer Domingo del Adviento
30 de noviembre
"Despierta la fe".
Señor Jesús,
enciende en nosotros la fe dormida.
Despiértanos del cansancio y del miedo,
haznos vigilantes para descubrir tu paso en la historia.
Que esta luz nos recuerde que tu amor no se apaga
y que siempre caminas con nosotros.
Ven, Señor Jesús. Ven, esperanza nuestra.
Gesto: encender la vela y ofrecer una oración por las personas que estén alejadas de Dios.
Segundo Domingo del Adviento
7 de diciembre
"Conviértete al amor"
Señor que vienes,
Haznos sencillos y valientes para cambiar.
Quita de nuestro corazón la dureza y el orgullo.
Y enséñanos a construir caminos de paz y justicia.
Que esta luz nos recuerde que solo el amor renueva el mundo.
Ven, Señor Jesús. Guíanos en tus caminos.
Gesto: realizar una obra de Misericordia.
Si no las conoces o no te acuerdas entra en este enlace: OBRAS DE MISERICORDIA
Tercer Domingo del Adviento
14 de diciembre
"Alégrate en el Señor"
Dios de la alegría,
Tú eres la fuente de todo consuelo.
Haznos testigos de tu gozo en medio de las dificultades.
Que esta luz ilumine nuestros rostros y disipe la tristeza.
Enséñanos a celebrar la vida donada y a reconocer tu presencia
en cada gesto de bondad.
Ven, Señor Jesús, ven alegría del mundo.
Gesto: cantar un villancico mientras se prepara el Belén en familia dejando el pesebre vacío.
Cuarto Domingo del Adviento
21 de diciembre
"Acoge al que viene"
Emmanuel amado,
Dios con nosotros y en nosotros,
enséñanos a recibirte con corazón limpio y casa abierta.
Que esta luz nos prepare para acoger tu presencia
en los pobres, en los niños, en los que sufren y esperan.
Haznos, como María, morada de tu ternura.
Ven, Señor Jesús. Quédate con nosotros.
Gesto: Tener un gesto de cercanía con los vecinos, familiares o miembros de la parroquia.
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