Queridos vecinos y hermanos todos en el Señor:
La festividad de San Isidro Labrador y de Ntra. Sra. del Rosario de Fátima, patrón y co patrona de La Mancha, que celebraremos con devoción y alegría en estos días del mes de mayo, nos lleva a valorar en primer lugar, la fe de muchas personas que, incansablemente han trabajado por poner en valor la identidad de una parte del municipio de Icod de los Vinos, caracterizada por el amor y el cuidado de la tierra, las costumbres y las tradiciones, sin perder de vista el importante anuncio de la Buena Noticia que tanto hoy como en el futuro hemos de seguir sembrando en el corazón de cada uno de los hombres y de las mujeres de nuestro entorno.
La paciencia fue una de las grandes virtudes que puso en práctica San Isidro Labrador, a lo largo de toda su vida, y en concreto, en los momentos en que las cosas se ponían cuesta arriba demostró ser más fiel y perseverante en la oración y en el trabajo. Siempre optó por Dios y no se cerró a su amor incondicional y a su Palabra transformadora. Él entendió su vida y misión en la tierra como un camino de santidad que debía pasar por la incomprensión, la humillación, las exigencias, la mentira. Sin embargo, su oración fue a más cada día. Lo cual le dio alegría, esperanza y paz. Y Dios le fue bendiciendo por su entrega, generosidad, silencio prudente, trabajo, confianza y humildad, que sorprendía cada con más fuerza a sus coetáneos. Y hoy, queridos hermanos, hemos de seguir su ejemplo. En medio de tanta inseguridad, incertidumbres, dificultades, los cristianos hemos de ser amigos fuertes de Dios y para eso hay que aumentar nuestra unión con Cristo. De esta experiencia seremos más fecundos y puentes de hermandad y servicio generoso a todos, especialmente a los más pobres y enfermos.
Un abrazo fuerte para todos y todas.
Vivamos estos días del mes de mayo unidos como hermanos y edificando un barrio más humano.
Gabriel Benítez Pérez.
Cura-párroco.
Icod de los Vinos, a 2 de abril de 2025
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