La Comunión en la mano




 En este día, sábado 9 de septiembre de 2023, se abre este nuevo espacio "La liturgia, lugar privilegiado del encuentro de los cristianos con Dios", que pretende, cada sábado, ir dando pistas para formar nuestra fe y crecer en la vida cristiana. 

Recibir la comunión en la mano

San Cirilo de Jerusalén, hacia el año 380; "cuando te acerques a recibir el Cuerpo del Señor, haz de tu mano izquierda como un trono para tu derecha, donde se sentará el Rey". 

Hacia el siglo VIII, en Roma más tarde, hacia el año 1000, fue prevaleciendo la costumbre de que los fieles no ordenados no recibieran la comunión en la mano, sino directamente en la boca.

En España fue en febrero de 1976 cuando oficialmente empezó a dar libertad para que cada fiel decida como quiere comulgar. Si en la mano o en la boca. 

Los dos modos de recibir el Cuerpo de Cristo son buenos y dignos. Pero tiene particular expresividad simbólica el que el fiel extienda su mano para recibir del ministro e Pan eucarístico (así se subraya la mediación de la Iglesia que le da la Eucaristía).

Recibir la comunión en la mano expresa que se quiere recibir el admirable don que Cristo nos hace a todos: su propio Cuerpo para la vida eterna. 

Del Catecismo de la Iglesia Católica: Los que reciben la Eucaristía se unen más estrechamente a Cristo. Por ello mismo, Cristo los une a todos los fieles en un solo cuerpo: la Iglesia. La comunión renueva, fortifica, profundiza esta incorporación a la Iglesia realizada ya por el Bautismo. En el Bautismo fuimos llamados a no formar más que un solo cuerpo (cf 1 Co 12,13)”. 


Hay muchos que participan en la Eucaristía y no pueden comulgar, o bien porque no están bien dispuestos, es decir, porque necesitándolo no se han confesado; o bien porque sus circunstancias personales, aunque lo deseen, no les permite acercarse a recibir la Comunión. Para estos el tono espiritual ha de ser el mismo que para los que comulgan; también ese momento de la celebración de Eucaristía es tiempo de oración y de intimidad con Jesús Sacramentado, si bien su comunión es “espiritual”. Por eso es tan necesario que los que comulgan den ejemplo de lo maravilloso e importante que es recibir a Jesús sacramentalmente. ¿Cómo van a desear recibirle los que no pueden, si los que comulgan le tratan con tanto descuido? ¿Cómo van a tener pudor de recibirle los que no pueden, si los que los lo hacen se acercan a comulgar tan a la ligera?. 


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